"El Espirítu Santo nos lo enseñara todo."
TODA GRAN AVENTURA COMIENZA CON UN SÍ.
NO TENGAS MIEDO.
EL SEÑOR NO QUITA NADA,
EN CAMBIO LO DA TODO.
Podemos experimentar la santidad de Dios.
¢Dios es Santo, santo, santo. Al experimentar la santidad de Dios en nuestros corazones, nos hace alabarlo y exaltarlo por lo que Él es (Salmos 30:4).
Nuestro espíritu se une al Espíritu de Dios y es ahí donde comienza un fluir de adoración a Dios, y podemos derramar nuestro corazón de una forma sincera.
¢Los serafines no paraban de dar voces alabando a Dios. Tan grande es la santidad de Dios que el pecado no puede habitar cerca de él.